VEINTINUEVE DE CINCUENTA Y DOS

VEINTIOCHO DE CINCUENTA Y DOS

Una de las cosas que más me gusta del verano es el atardecer en el la playa. El calorcito ya no aprieta tanto, el agua está deliciosa y los niños tienen más sitio para jugar y rebozarse por donde quieran. Pero lo que más me gusta de todo es la luz a esas horas. Una luz dorada, casi mágica que hace que por otro año consecutivo me "arriesgue" a llevar la cámara a la playa. Y como siempre.... merece la pena. Y vosotros, teneis fotos de este veranito en la playa?.

VEINTISIETE DE CINCUENTA Y DOS

Que tendrán las vacaciones, que hacen que los helados sepan mejor...

...los paseos al atardecer se vuelvan mágicos...

 ... y las tardes las pasamos a remojo hasta que la piel se nos queda como "garbanzitos".